¡Buenas tardes! Con este post despido la navidad, la época del año más bonita para mí y mi familia. Despido este pasado 2015, del que hago balance muy contenta, por haber afrontado con decisión y coraje sus subidas y bajadas, sus cosas buenas y malas, sus imprevistos y sorpresas. Doy gracias por haber tenido a mi lado a mi familia y amigos, a la gente que quiero y con la que quiero seguir compartiendo este año nuevo que viene empujando fuerte: cargado de sueños y nuevos retos, nuevas esperanzas e ilusiones por cumplir.
No quería dejar pasar la ocasión de mostraros las cositas dulces que he hecho en Navidad para los que más quiero, y con quienes he compartido tan bellos momentos.
Galletas de acebos, hechas con muchísimo cariño y llenas de buenos deseos. La receta de la masa de galletas la tenéis aquí)
Estrellas de fondant y purpurina, repletas de magia e ilusión.
Y maravillosos copos de nieve, que aunque no se puede decir que este año haya sido una "blanca navidad" porque el tiempo ha resultado fantástico y no ha hecho nada de frío aquí en Madrid, nos transporta a un mundo mágico lleno de fantasía.
Y por último, solo me queda mostraros el tronco de navidad que hice para una persona muy querida y que espero le haya gustado.
El bizcocho era un bizcocho ligero de vainilla (pincha aquí para ver la receta), relleno de crema pastelera y decorado con coco rallado. Las hojas de acebo y los frutos rojos son de fondant (pasta de azúcar).
Con estas imágenes, cierro esta Navidad de 2015 tan familiar y llena de cariño.
Espero que para vosotros haya sido tan especial y entrañable como la mía.
¡Adiós dulce Navidad!
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