jueves, 10 de julio de 2014

TARTA EROTICA

¡Hola a todos! Hoy os traigo una tarta erótica que me encargó hace unas semanas una amiga.
Sara me llamó y me dijo que iba a ser el cumpleaños de la madre de una buena amiga. Cumplía cincuenta maravillosos años, y su hija quería obsequiarla con una fiesta sorpresa. El reto esta vez consistía en hacer una tarta erótica  y sus instrucciones fueron muy concretas: el fondo de la tarta debía de ser azul,  el miembro viril masculino negro y de tamaño XL, querían una boca con labios rojos, y que el conjunto fuera lo más realista posible, (incluso me mandaron por wassapp una foto de una tarta similar que habían encontrado en internet para que me hiciese una idea de como querían que fuese su tarta)  Y este fue el resultado. ¿Qué os parece? ¿A qué apetece darle un mordisco? Ja,ja,ja, ¡Si me descuido se me sale de la tarta! ¡Era enoooormee! Ja,ja,ja.

El bizcocho era de vainilla, relleno de crema de chocolate blanco en un corte y mermelada de naranja en otro. Para confeccionar el pene lo hice en  RKT (Rice Krispies Treat) golosina de arroz inflado, para que no pesara mucho. (Os podéis hacer una idea de como quedó: parecía una barrita de cereales de tamaño XL, ja,ja,ja. Tuve que utilizar esta técnica de RKT porque las figuras pesan muy poco, es muy fácil de trabajar y sobre todo de moldear y tallar. Se pueden hacer miles de decoraciones sin correr el peligro de que se hunda la decoración con el peso, pues esta mezcla es muy ligera, y la figura modelada, pesa muy poco. (Prometo poneros la receta que yo utilizo en breve, por si os apetece probar a modelar una figura sencilla).  El resto de decoración estaba realizado con pasta de azúcar y glasa.




Según me comentó Sara al día siguiente, la cena fue estupenda, la sorpresa de la tarta genial; por lo visto le encantó a la madre de su amiga (les gustó mucho a todas los comensales,  pues estaba riquísima),  y como remate las chicas fueron a ver un espectáculo de "boys" que  fue el broche final de la fiesta. Hubo muchas fotos, bromas, risas y buen humor.
En fin, la cumpleañera y las acompañantes pasaron una noche divertida, picarona y sobre todo la mar de dulce.  Y es que no iba a ser para menos. ¡Todos los días no se cumplen cincuenta años! ¡Claro que no!
¡Felices Cincuenta amiga!

Saludos

María José

Y  recuerda... ¡pon un dulce en tu vida!



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